¿El portátil no se enciende? Si su portátil no se enciende, aunque esté enchufado, podría tener una fuente de alimentación, una batería, una placa base, una tarjeta de vídeo o una memoria RAM defectuosas.
Para solucionar un portátil que no se enciende, empiece por lo más básico. Asegúrese de que el enchufe del cable de alimentación está conectado a una toma de corriente y al ordenador.
Comprueba la batería del portátil y el conector de alimentación para asegurarte de que la conexión no se ha soltado. Si aún así no se enciende, podría ser un problema con un componente interno (si no tienes mucho conocimiento sobre el tema, un servicio técnico HP se podría hacer cargo).
Comprueba el cable de alimentación
Lo primero y más importante es asegurarse de que el portátil está enchufado. Comprueba cuidadosamente que el cable de alimentación no esté doblado o roto, ya que podría interrumpir el flujo de electricidad.
Si la caja del transformador de CA muestra signos de decoloración, olor a quemado o partes deformadas, probablemente deba ser reemplazada. Si encuentra algún fallo en el cable de alimentación, sustitúyalo.
Puede encontrar fuentes de alimentación de repuesto en Internet, en tiendas de electrónica o llamando al fabricante de su ordenador. Si encuentras algún daño en la fuente de alimentación, desenchúfala de la pared y del portátil hasta que puedas sustituirla.
¿Están bien las conexiones y la batería?
Una vez que hayas descartado una fuente de alimentación defectuosa, comprueba el conector de alimentación del propio portátil. Los conectores de alimentación pueden aflojarse con el tiempo y dejar de funcionar. Si hay daños evidentes en el conector de alimentación, o piezas sueltas o que se mueven, lleva el portátil a reparar.
Si es posible, retire la batería del portátil e intente encenderlo sólo con la fuente de alimentación conectada. Si el portátil se enciende sin la batería, cámbiela para que se cargue y encienda correctamente. Algunos fabricantes, como Apple, no le permiten extraer la batería usted mismo, en cuyo caso lleve el portátil para que le cambien la batería interna.
Cuidado con el sobrecalentamiento
La mayoría de los procesadores de los portátiles tienen una protección térmica interna que apaga el ordenador. El portátil no volverá a arrancar hasta que el sistema se enfríe. Si utiliza el ordenador sobre una cama, una almohada u otra superficie blanda, asegúrese de que las rejillas de ventilación del ordenador no están bloqueadas y de que el aire caliente se desplaza correctamente.
Un portátil que no se ventila correctamente podría tener un ventilador defectuoso que debe ser sustituido por un profesional en servicio técnico HP. Si el portátil está caliente al tacto, deje que se enfríe completamente antes de intentar volver a encenderlo. Un portátil que vuelve a encenderse una vez que se ha enfriado es muy probable que tenga un problema de sobrecalentamiento.
Problemas internos
Si no encuentra ningún problema con la fuente de alimentación, la batería o el sobrecalentamiento, es posible que un componente interno defectuoso esté causando el problema: una placa base rota o dañada, por ejemplo, o circuitos de carga dañados, una tarjeta de vídeo defectuosa, memoria RAM o problemas de software.
Si ha abierto recientemente el ordenador y ha tocado algún componente, la electricidad estática puede haber causado daños. Si sospecha que un componente interno está causando el problema, lleve el ordenador a reparar en un servicio técnico HP o hable con el fabricante para obtener los detalles de la garantía y la sustitución.